viernes, 29 de septiembre de 2017

Es difícil engañar a los viejos.

Cuando los poderosos confunden intencionadamente  al pueblo para tenerlo dividido y así seguir ellos en la vagancia, la poltrona y la mamandurria a costa del trabajo y sacrificio de ese pueblo, se me revuelven las tripas. Yo recuerdo cuando el clero catalán dominaba moral e intelectualmente al pueblo y les hacía corear: “Volem bisbes catalans”, porque tenían en Barcelona un obispo de Valladolid, al mismo tiempo que enviaban obispos al resto de España, como el de Astorga de aquellos  mismos días Antoni Briva y Miravent. A los viejos les es mucho más difícil engañarnos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario