jueves, 18 de diciembre de 2014

Libros de papel.


De mi estricta propiedad, he  mandado para la biblioteca central de una orden religiosa, seis mil libros. Hala, menudo peso me he quitado de encima. Aunque soy muy mal cristiano porque a menudo me entran ganas de abofetear a más de uno, igual eso me sirve para que me enchufen con San Pedro, quién sabe… Me he quedado con los libros de Medicina, historias de la Literatura, una Biblia, un Quijote, “El Baco”, “El enigma de Baphomet”  y pocos más: los que eran de Charo soltera y los que son de los dos, bienes gananciales aportados al matrimonio…Como me he acostumbrado a leer en pantalla, fuera  el papel.. Y mi mesa de estudio, que siempre era un desastre, ahora da gusto, cuatro cables y todo despejado. He rezado con la “mantis religiosa” que ha venido a mi ventana a concelebrar la ceremonia por su eterno descanso. Y me he quedado igual  que si hubiera parido.

domingo, 14 de diciembre de 2014

El guarnicionero ( Episodio de "El Baco)







Pablo quedó corrido. Se puso un poco colorado respondiéndole:
—Son mis cosas personales.
—No es mi intención tocar nada que no sea mío, muchacho. Anda, prueba tú. Seguro que este sí vale.
—Claro que vale. ¿Cuánto cuesta?
Te lo regalo. Para que lleves un buen recuerdo de Astorga.
No salía de su asombro, ya que tantos regalos en tan poco tiempo le parecían producto de un fenómeno paranormal, porque no era posible que tanta suerte le acompañara.
Enfrente, al cruzar la calle, le esperaba la guarnicionería abierta y el guarnicionero clavando remaches en unos arreos con tirantes. Pablo nunca había entrado en una tiendita tan pequeña y miserable. Despedía un olor insoportable, tan penetrante como el de las medinas de Tetuán, Fez o Tánger.
—¿Tiene usted cabo de cuero?
—¿Cuántos metros quieres?
—Sólo un poco para atarme estas llaves al cuello, para que no se me pierdan.
—¡Bah! Para eso, todavía tengo restos de cuando venían todos los niños de Astorga a reparar las boquillas de los balones. Tú eres muy joven y de eso ya no sabes. Como ahora todos los balones tienen válvula... ¡Mira esos curas que pasan por la calle! El más alto es nuevo, lo trajo el Obispo desde Cataluña. Yo soy ateo, pero me jode que este obispo sea catalán, porque aquí hubo un obispo cojonudo, que hizo más por Astorga que todos los alcaldes juntos. Bueno, no sólo por Astorga, por toda la comarca, hasta La Cabrera. Desde aquí lo destinaron a Barcelona, o se fue, bueno... yo no sé cómo es eso. El caso es que los catalanes, por no ser catalán lo echaron pa Toledo. ¡No te jode! —Al volverse Pablo hacia la calle, vio al cura más alto con el sustituto del archivero—. ¡No te jode...! Pues, a lo que iba. El otro más bajo... ¡Huy, diosla! Precisamente, ese era el balonero cuando seminarista. Hace más años de esto, ya, que la puñeta. ¡Rediosla, cómo pasan los años! ¡Cuántas veces entraría por aquí a que le cosiera los balones con aquella sotanina y un fajín azul! Porque entonces, los seminaristas, que les llamábamos los curinas, iban de sotana, como debe ser, no como ahora que se la quitan hasta los curas, curas. Bueno, mira, hombre, por lo menos esos dos la conservan. Ahora irán... ¿qué sé yo?, a Puertarrey, a decir misa. ¿Tú sabes lo que es misa? Pues, una reunión de ignorantes mirando «p’al culu» de un tunante. —Se reía el hombre con dos huecos de muelas vacíos y dos dientes forrados de acero—: Ya ves, lo conocí cuando era un mocosín y ahora ni me habla; pasa por ahí y como si nada; todo porque no me ve por la Iglesia. ¡Que se «vaiga» a la mierda, hombre; que se vaigan todos a la mierda! Ahora, que van a ganar los nuestros, le cantaremos otra vez el himno de Riego, que cantaba mi padre:
Si los curas y «flaires» supieran
las palizas que van a lleva-a-ar
bajarían del coro pidiendo
libertad, libertad, libertad.
Pablo se reía al contemplar al guarnicionero entusiasmado, cantando con la voz un poco temblona pero sin desafinar ni una nota y los gestos de todo el cuerpo exagerados para expresar sus displicencias, al tiempo que una voz vieja, desde dentro, decía:
—Rosendo, no cantes eso.
—Tú, haz el cocido, Catalina —respondió el hombre con un salivazo que se estrelló contra el pecho de Pablo—, que yo sé cómo entendérmelas. —Entornó los ojos y sacudió la cabeza y mano derecha en sentido contrario. Habló más bajo—: bueno, rapacín, toma el cabo, porque vas a decir que el guarnicionero está pasao de rosca. Este cuero es de piel de jato.
—¿De piel de gato? —se extrañó Pablo.
—De jato, ¡coño! De jato. ¿No sabes lo que es un jato? ¡Jodío el rapaz! Y seguro que eres estudiante. ¡Sandiosla! No sé qué coños estudiáis. Te voy a decir un verso, verás:
Todavía mantenía el cuero en su mano mientras trataba de recordar, marcando arruguillas en la frente y juntando las cejas con la boina.
—¡Ah, sí, ya me acuerdo!
Entre risas de jijirijí fue declamando:
—Estudiantes que estudiáis
los cuentos de Jijiri jondo.
¿Queréis decirme por qué
los burrus cagan cuadrao
teniendo el culu redondo?
Pablo, al ver aquel cuadro enmarcado por alguna que otra telaraña, no podía disimular su impaciencia extendiéndole la mano para recoger el cabo. Esbozó una forzada sonrisa. No podía encasillarlo en ningún tipo. Sin duda era un hombre raro.
—¡Me cagüen el rapaz del coño! No te ha gustado el verso; pero, a que te ha gustao la canción, ¿eh? Y eso que ya se me ha olvidado. Cuando yo cantaba bien, era en el coro del hospicio. ¡Mira!, esos sí, esos eran buenos curas, sólo nos pegaban cuando lo merecíamos. Las hermanas no, esas sí que nunca vi que pegaran a nadie. ¡Las monjas son otra cosa!…
Para probar si por fin le daba el hilo de cuero, se atrevió Pablo a preguntarle: —¿Qué es el hospicio?
—Pues... ¡Coño! ¿Qué va a ser? ¡Me cagüen la! El hospicio siempre ha sido el hospicio. ¡Mira el rapaz! ¿Tú no sabes lo que es el hospicio? A los once años me quedé huérfano de padre, porque de madre ya lo era a los cuatro, y como los hermanos de mis padres, todos eran criados, ¿dónde me iban a llevar?… al hospicio a que me cuidaran y a aprender el oficio del cuero. Bueno, otros aprendían el de carpintero, zapatero, encuadernador, fontanero o cualquier otro que allí nos enseñaban.
—¡Ah! Como la Misericordia —interrumpió Pablo.
—¡Pues claro! ¡Coño! ¡Hale, chaval! Toma el cabo, y que te den «por el culu».
Pablo pensó que el guarnicionero estaba un poco loco como él mismo se sospechaba. También olía mucho a coñac y no le dio más importancia volviéndose a asombrar de que, poco a poco, en Astorga le iban saliendo gratis las compras. Cruzó el umbral de la puerta y al intentar cerrarla se le vino encima. Se cayó Pablo sobre unas tiras de cuero y se rompieron dos vasijas de barro. Exclamó el desdentado:
—¡Me cagüen la, y muy alá! ¡Chaval del coño! ¡La madre que te parió! Yo, que la tengo desbisagrada pa que nadie se atartalle ... ¡Vete al cuerno de una vez! ¡Anda, al carajo!
Retrocedía hacia el kiosco por ver si venderían mapas de carreteras mientras tejía un nudo al hilo de cuero con las llaves del candado ensartadas para colgarlas al cuello, a modo de amuleto africano. Las diez campanadas de la mañana en el reloj de la catedral anunciaban la sinfonía orquestada del resto de las torres de la ciudad. En Astorga son tan bellos los tañidos, que inspiraron a Claude Debussy los compases ciento quince al ciento treinta y seis de su obra «Pour le piano, III. Toccata», dedicada «à N.G. Coronio»; y un insigne poeta olvidado, nacido en Brimeda, compuso en la Biblioteca de la Sorbona, allá por los años treinta, con mucha nostalgia, este delicioso cuarteto:
Yo no sé lo que tiene la campana…
Yo no sé lo que tienen sus sonidos…
En suspense se quedan mis sentidos
A su dulce dan, dan, de la mañana.
Olvidóse Pablo, por momentos, de su intención de buscar un plano para trazarse el itinerario; y, mirando el firmamento, voló sobre los tejados atrapando los sones con sus ecos, con tanta fruición que, por avariento, no le cupieron en la alforja; hubiera deseado llevarlos para enmarcar sus documentos.
Emprendió una caminata cuesta abajo, por la carretera de León, pensando que sería muy fácil llegar pronto a la capital de la provincia, y desde allí, por Valladolid y Madrid, hasta Málaga.
El trotamundos silbaba desacompasado por tanto peso como llevaba en las espaldas. Habiendo andado un buen rato, se sentó en la cuneta a la sombra de una acacia. Tantos coches pasaban que siguió pensando que el autostop sería un éxito nada más intentarlo; con todo, no se alejó de la vía férrea, no siendo que, por mala suerte, se viera obligado a tomar el tren en la estación, que se encuentra muy cerca, con los cinco taxis a la puerta.
No pudo remediarlo; a borbotones le subía la sangre al cacumen cuando desenvainaba los pergaminos con muchísimo cuidado. Los contempló durante más de dos horas sin enterarse apenas del ruido de coches tan molesto, que intermitentemente se oía a su lado. La miniatura, una joya; y de los escritos, a duras penas consiguió descifrar nada después de darles muchas vueltas, excepto una especie de glosa, al margen inferior, escrita con caligrafía muy moderna, que en nada se parecía al resto de las caligrafías de los escritos, que intentaban emular la redonda germánica. En la glosa figuraba el nombre de un pueblo: Sahagún de Campos.
Mientras tanto, sus compañeros se desperezaban al otro lado de Astorga, sin haberse dado cuenta de la ausencia. Sólo Leo sospechó algo raro al echar de menos la mochila de Pablo, aunque no alarmó a nadie no fuera a ser que luego volviera.
A eso de las doce, cuando el sol empezaba a hacer mella, sintió hambre y reparó en que con nada se había aprovisionado, de tal manera que retrocedió un par de tiros de piedra hasta la garita del guardagujas: la única que alberga empleado en toda la red de ferrocarriles; y Pablo, que no tiene pelos en la lengua, inició un diálogo largo con el pretexto de preguntarle por la ubicación del establecimiento más cercano:
—Buenos días.
—Para mí, buenas tardes, porque ya he comido.
—Pues eso quería preguntarle: por algún sitio para comprar algo.
—Por aquí cerca... la verdad es que no hay nada. Como no sea en aquel bar, al otro lao de la carretera... Y ahí, de comer no tienen; más bien, sólo bebidas. Casi te merece más la pena llegarte a San Justo, el próximo pueblo, que retroceder a Astorga, pues «t’oservé» que «intentastes» hacer «estor» «p’aquel» «lao»; ahora no cogen a nadie, «tien» miedo a los atracos. Yo bien me acuerdo que hace unos años, mozos así como tú y soldaos del regimiento... ¡Cuoño! Hasta las obreras de la Aiptesa que «velai» está más «p’alante», «lueguín» cogían a todos. ¡Cuoño! ¡Cuántas veces me quisieron montar al ir y venir a San Justo; y yo: ¡Que no, muchas gracias! Prefiero ir andando, que estoy «tol» día «sentao»; la mayor parte leyendo, claro... ¡Ay, amigo! Ahora ya no es «cumo» antes. Además, con eso de los «drogadictus»…
Pablo estaba encantado de oír a aquel hombre; su manera de hablar le parecía una reliquia; y para que siguiera hablando, intentó hacerse el simpático con un estereotipo:
—Naturalmente, con Franco se vivía mejor.
El hombre quedó estático y cambió el semblante.
—Tu eres bubín, qué sabrás tú de Franco.
—Yo, nada —intentó remendar y sacar la pata—. Como toda la gente mayor dice eso…
—¡No hombre, no! Estás engañao. Yo estuve diez años en un pajar escondido, del treinta y nueve al cuarenta y nueve. Y como yo, muchos. Luego, cumo nadie nos denunció, fuimos saliendo y, unos de labradores, otros cumo pudieron. ¡Qué sabrás tú! Yo soy sargento de la República, y mi capitán viene todos los martes a vender; a vender al mercao la colina de berza, las lombardas y los guchines pa recría. Di tú que, si ahora ganamos los republicanos, nos darán la jubilación y todu lo que nus deben; y yo creo que sí... ¡Sí, hombre, sí! Ya verás cumo, esos chicos de Sevilla traen la República. A ver si el próximo nieto nace ya con la República. Mira, allí viene Rosalinda, la mayor; pero tengo otrus dos más piquiñines. Ahora me trae el butijín pa la tarde. Por la mañana traigu yo esti bien frescu, del pozu; pero vai poco a pocu y ponse caliente. Bueno, y a todu esto, ¿tú, de onde eres?
—Soy malagueño.
—¡Ah, cuoño! Por aquí se dice que en Málaga no enturan a los muertos, que los echan al mar, pa darle de comer a los boquerones.
—¿Quién ha dicho eso?
—Es una broma, hombre. Ya sé que sólo a los marineros cuando la espichan en alta mar. ¿No ves que ahora con la televisión nos enteramos de todu? Hace poco que me enteré yo de lo que eran los boquerones. Lo mismo que allí no sabrán lo que son las lancurdias.
—¿Qué son las lancurdias? —le preguntó Pablo sorprendido.
—Son unos peces que cantan. Tien unas pintinas rojas, así, por la barriga. Se crían aquí en el río Tuerto. ¡Bueno!, son truchas pero “piquiñinas”.
—¡Tuerto! ¡Vaya nombre de río!
—Es que Tuerto, no es que le falte un ojo. Quiere decir que no va «a derecho». Pues ya que no te gusta el nombre, te voy a enseñar una cosa.
Con parsimonia sacó un papel doblado y raído del bolsillo de la camisa, y después de la pausa siguió:
—Mira qué maravilla. Esta poesía se la hizo al Tuerto un rapacín de Astorga cuando estudiaba en el Instituto. Hoy es médico. Toma, llévatela de recuerdo, que yo la tengo en un cuadro y no me hace falta; ya la copiaré otra vez.
Buscando con la mirada a lo lejos, murmuró:
—Esa rapacina, viene demasiao amodín. ¿Con qué se estará entreteniendo?
—Mírela allí, al lado de la tapia. Está cogiendo dalias.
—Le encantan las flores. Cumo donde ella vive no hay ni una planta ni un árbol, cuando viene en el verano a casa de los abuelos, no hace más que coger flores y atrapazar el río.
—Vivirá muy lejos, porque he visto que todo León es muy verde.
—¡Ay, hijo! Hay pueblos que pasan sed y los panes a veces se secan cuando no llueve a tiempo. Allí mismo donde viven mi hija y el yerno.
—¿Aquí? ¿En la provincia?
—¡P’ahí, pa la parte de Sahagún! Es un pueblín piquiñín…
—¿No será Sahagún de Campos? —interrumpió Pablo asombrado.
—No, Sahagún es muy grande.
—A ver si me entiendo: digo, que si el pueblo que usted ha nombrado, es Sahagún de Campos.
—Pues, claro. No hay otro. No hay más Sahagún que el de Campos.
—Es que, mire usted... —no sabía Pablo cómo entrar en lo definitivo, que colegía de haber dado tantas vueltas a las glosas del pergamino de la miniatura, unido a lo que el sustituto del archivero le había adelantado—. Yo he oído que por los pueblos cercanos a Sahagún de Campos, algo así como que se adoraba a un dios pagano... No sé…
—No, hijo, no. ¡Ahí la gente es muy beata! Todos los pueblines tienen cura, aunque no tengan médico mi farmaceútico. A mi hija la obligaron a bautizarse pa la boda, que yo no la había bautizao. ¡Porque mis consuegros son de derechas! No creas que no hubo sus más y sus menos. Y Rosalinda, el año pasado hizo la primera comunión. La verdad es que iba como una novia, como una reina. ¡Ah...cabáramos! Ya sé a lo que te vas a referir... ¡Al dios Baco!
Encontró Pablo la oportunidad para preguntarle:

—El dios Baco es el dios del vino, ¿no?

jueves, 11 de diciembre de 2014

¿Nos quedaremos sin Google?

Hoy me he acordado del día en que Alfonso Guerra dijo que le iba a mandar una "Constitución" al Presidente de los EEUU para que aprendiera democracia. Así, con sus atributos encima de la mesa y gracejo sevillano. También he rememorado el día en que Zapatero dijo que un leonés de pro no se levantaba cuando pasara el símbolo por excelencia de “iunaited steits of américa”. Dicho sea de paso, entre Ana Botella con el “cofi” y Zapatero con el  “The time is good” que le espetó al Presidente de Inglaterra, vaya dos profesores de Anglística…

Pues el ministro Wert también sigue la senda de ponerse chulo con las empresas americanas, de manera que el próximo día 16 nos quedamos sin Google News, por chulos. Pa chulos nosotros, los descendientes de don Pelayo y de Guzmán el Bueno…

Pues nada hijos, a seguir por esa senda... La próxima a ver si conseguimos que nos desconecten de Safari, de Explorer y de  Fire Fox, y así hasta conquistar la desconexión de  Facebook de paso, y, ya de puestos, también de Amazon, de PayPal y de otras empresas de explotadores capitalistas americanos del mismo estilo… y nos vamos con la cabeza bien alta a echar un cigarrín a la sierra y echar un “coño” por todo lo alto, diciendo “¿qué se habrán creído?”

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Poner bragas a "El origen del Mundo" o camisón a "La maja desnuda"

 EL ORIGEN DEL MUNDO  ( GUSTAVE COURBET)
LA MAJA DESNUDA  ( GOYA)


Pues no estoy de acuerdo con Arturo Pérez Reverte. No he leído su edición del Quijote para escolares ni pienso leerla. Además el precio del libro electrónico, de 6,95 euros me parece  desorbitado. Una obra de arte que sufre una mutilación ya no es una obra de arte sino una chapuza por definición; ya puede decir lo contrario Darío Villanueva y el mismo Reverte con el director de la RAE incluido.

Adaptar el Quijote es como ponerle bragas al cuadro “El origen del mundo”  de Gustave Courbet,  cuando lo vayan a contemplar o estudiar los escolares. Ya sé, ya sé que no es lo mismo, pero en uno y otro caso están los profesores de Literatura y de Historia del Arte para programar el momento, dada la sicología evolutiva de los alumnos, en que ambas obras han de ser abordadas en los planes de estudio. 

Yo mismo he tenido mozalbetes  y “mozalbetas” de segundo y tercero de BUP en el aula que, leyendo y comentando  y explicando el Quijote, los he visto reír a carcajadas o saltársele una lágrima contenida tragando saliva, y lo entendían y asimilaban, vaya si lo entendían. Todo es cuestión del empeño del profesor de Literatura. Creo que Pérez Reverte  y Darío Villanueva yerran en su diagnóstico para escolares, como ellos los llaman; y sobre todo Reverte cuando dice que  las “costuras de las supresiones han sido cuidadosamente realizadas.” 

No puedo imaginarme a un profesor de Literatura explicando las costuras, como tampoco me entraría en la cabeza el profesor de Arte recortando en el cuadro susodicho el vello púbico y los labios mayores para analizar sólo el dibujo del magistral escorzo y  el resto de las masas pictóricas. Prográmese la lectura, eso sí, para el momento en que el alumno pueda asimilarlo ya que para otros momentos tenemos muchos libros con los que explicar gramática y vocabulario.


Lo siento, Arturo, pero  es mejor que lean "El Capitán Alatriste" antes que mutilar el Quijote. Además, poniendo empeño e ilusión, estáte seguro, cualquier libro, por malo que sea, vale para hacer una buena clase. Empeño e ilusión es lo que deben atesorar los nuevos profesores que nos relevan, y no tantos papelines para rellenar la burocracia infinita que no vale para nada. Y por supuesto, que antes de meterse a ello, hayan leído  concienzudamente cuatro o cinco veces, al menos, el Quijote. Como dice un proverbio catalán, ahora que está tan de moda: “El bon mestre sota el pi fa l’escola”.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Carta al Papa Francisco

Raad Salam Naaman

Raad Salam Naaman es iraquí, nacido en Nínive (Irak), de mayoría musulmana (Sunnies). Criado y educado en Basora, de mayoría Ši`ies, en el seno de una familia católica (caldea), vivió muy de cerca -haciendo el servicio militar- el desarrollo de las guerras de Irán-Irak y la primera del Golfo. Víctima de numerosas persecuciones y detenciones debido a sus ideas pacifistas ante ambos conflictos y contra el radicalismo islámico, es uno de los pocos afortunados que ha logrado salvarse, escapando y buscando una nueva vida en España, país en el que obtiene asilo político y la nacionalidad española.
Es licenciado en Filología Árabe y Estudios Islámicos y también en Ciencias Económicas. Tiene un diploma de estudios avanzados en Ciencias de las Religiones y un doctorado en Filología Árabe y Estudios Islámicos.


Beatísimo Padre Su Santidad Papa Francisco:

La visita de Su Santidad, a Turquía es una muestra de una gran valentía. Turquía de Erdogan, es una gran candidata y aspirante al título del “califato”, recordando y beneficiando de su antigua experiencia en la zona como gran potencia “antiguo imperio otomano”. Turquía, nunca olvida su antiguo imperio otomano perdido. Pretende conseguir la ayuda y una primacía amable entre sus vecinos especialmente, Arabia Saudita y Qatar, aprovechando de su buena relación con EEUU y el occidente por ser miembro de la OTAN para cultivar el momento de ganar terreno. No dejamos engañar por la cara amable de Erdogan y su famosa prepuesta de la “alianza de civilización”, es un islamista radical, su biografía y sus hechos hablan de él mismo. De hecho, toda la región está viviendo una inestabilidad política, removida por revoluciones dirigidas por radicales islámicos que han cambiado completamente el pasaje geopolítico-religioso de la región.

La verdad la visita de Su Santidad, a Turquía tiene muchísimo significado, para nosotros “los cristianos Orientales”, principalmente los cristianos de Irak y Siria, frontera con Turquía, que están sufriendo la persecución y el genocidio a manos de los musulmanes intolerantes. La ola islamista que ha invadido los países árabes, ha traído la inquietud a las minorías cristianas ya preocupadas por su supervivencia y que temen por su futuro en sus países de origen.

Estoy segurísimo de que el objetivo principal de Su visita a Turquía, tenía una misión y un resultado específico; dar aliento a las minorías cristianas en la zona, en especial Irak y Siria, cada vez más amenazadas en su persistencia y lanzar un mensaje de aguante, paz, tolerancia, reconciliación, impedir su éxodo de sus países natales y su relación con el Islam. Dar testimonio del Evangelio, del amor y de la paz a los musulmanes y con ello la importancia de la libertad religiosa que inquietan directamente a la fe y la presencia cristiana en Irak y Siria.

Su Santidad, en Su última visita a Turquía dio un ejemplo de un verdadero cristiano, discípulo de nuestro Señor Jesucristo, valía, humildad, seguridad, cercanía, sinceridad…etc. Cualidades, que nunca pueden mostrar los musulmanes ni sus líderes religiosos. En su encuentro con el máximo dirigente musulmán y el Presidente de Asuntos Religiosos en Turquía, Su Santidad afirmó que: “Hay efectivamente guerras que siembran víctimas, destrucción, tensiones, conflictos interétnicos e interreligiosos; hambre y pobreza que afligen a cientos de millones de personas; daños al ambiente natural, al aire, al agua, a la tierra. Desde la aparición del Estado Islámico y la situación de los cristianos en el Medio Oriente es verdaderamente trágica, especialmente en Irak y Siria. Todos sufren las consecuencias del Yihad islámico y la situación humanitaria es angustiosa. Pienso en tantos niños, en el sufrimiento de muchas madres, en los ancianos, los desplazados y refugiados, en la violencia de todo tipo. Es particularmente preocupante que, sobre todo a causa de un grupo extremista y fundamentalista, enteras comunidades, especialmente- aunque no sólo- cristianas y yazidíes, hayan sufrido y sigan sufriendo violencia inhumana a causa de su identidad étnica y religiosa. Se los ha sacado a la fuerza de sus hogares, tuvieron que abandonar todo para salvar sus vidas y no renegar de la fe. La violencia ha llegado también a edificios sagrados, monumentos, símbolos religiosos y al patrimonio cultural, como queriendo borrar toda huella, toda memoria del otro. Como dirigentes religiosos, tenemos la obligación de denunciar todas las violaciones de la dignidad y de los derechos humanos. La vida humana, don de Dios Creador, tiene un carácter sagrado. Por tanto, la violencia que busca una justificación religiosa merece la más enérgica condena, porque el Todopoderoso es Dios de la vida y de la paz. El mundo espera de todos aquellos que dicen adorarlo, que sean hombres y mujeres de paz, capaces de vivir como hermanos y hermanas, no obstante la diversidad étnica, religiosa, cultural o ideológica. A la denuncia debe seguir el trabajo común para encontrar soluciones adecuadas. Esto requiere la colaboración de todas las partes: gobiernos, dirigentes políticos y religiosos, representantes de la sociedad civil y todos los hombres y mujeres de buena voluntad. En particular, los responsables de las comunidades religiosas pueden ofrecer la valiosa contribución de los valores que hay en sus respectivas tradiciones”

Su Santidad, hablando con familiares y amigos de mi país Irak, cristianos fieles que hemos sido perseguidos tanto nosotros como nuestra familia, todos coincidimos y estamos molestos y alterados por Sus desafortunadas declaraciones durante el viaje de retorno a Roma de Su visita a Turquía. Su Santidad sostuvo el habitual coloquio con los periodistas que iban a bordo respondiendo a las preguntas de los periodistas. Una de Sus primeras respuestas, a quien le pregunto sobre la “islamofobia, la cristianofobia y el diálogo interreligioso” dijo: “El Corán es un libro de paz, es un libro profético de paz. Esto no es islam(ismo). Yo entiendo esto y creo - al menos yo creo, sinceramente - que no se puede decir que todos los islámicos son terroristas: no se puede decir esto. Como no se puede decir que todos los cristianos son fundamentalistas, porque nosotros también los tenemos, ¿eh? En todas las religiones existen estos grupos, ¿no? Yo le he dicho al Presidente: pero, seria bello que todos los líderes islámicos- sean líderes políticos, líderes religiosos o líderes académicos- digan claramente y condenen aquello, porque esto ayudará a la mayoría del pueblo islámico a decir: no, pero de verdad, pero de la boca de sus líderes: el líder religioso, el líder académico, tantos intelectuales, y los líderes políticos. Todos nosotros necesitamos una condena mundial, incluso de los islámicos, que tienen la identidad y que digan: nosotros no somos aquellos. El Corán no es esto”. Todos los cristianos de Irak, hemos estudiado, desde muy jóvenes en el colegio, obligados, el Islam, la vida de su Profeta Muhammad y sus libros sagrados tanto el Corán como la Sunna (shari’a). Sabemos y de sobra que el Islam no es una Fe divina, Muhammad es un falso profeta y el Corán es un libro violento. El Islam es un mal y para vencer el mal hay que reconocerlo y conocerlo.

Por todo ello, como cristiano católico caldeo de origen iraquí, fiel a mí Fe, a mí Iglesia y a mi máximo autoridad, Su Santidad. Conocedor del mundo árabe musulmán, y desde el cariño y el amor que siento a mi comunidad cristiana en Irak, lo que más quiero en este mundo, permítame reflexionar y analizar Su visita a Turquía, espero que servirá para algo, como pido perdón de antemano por mi atrevimiento.

Su Santidad, mis hermanos cristianos en Irak, están sufriendo la persecución y el genocidio a manos de los islamistas tanto sunnies como chiies. Lo primero que hicieron los radicales islámicos, partidarios del Califato Islámico, después de conquistar Mosul es devastar las iglesias, invadir, quemar y destruir las casas y negocios de los cristianos, mandar un ultimátum a todos los cristianos ciudadanos de Irak, a convertir al Islam o abandonar el país, si no, sus espadas están afiladas y legitimadas sobre sus cuellos. Los musulmanes han y están matado muchísimos cristianos en Mosul ciudad y los pueblos cristianos alrededor, entre ellos mi pueblo. No quedan muchos cristianos en Irak, los pocos que quedan están pidiendo auxilio porque no saben qué futuro les espera. En Irak, en 2003 había 2.000.000 de cristianos, hoy día no sumamos más que 100.000. Los cristianos de Irak, no tenemos milicias, ni armas, somos gente de paz. La situación es catastrófica, la violencia y la persecución llevó a cientos de miles de cristianos de Irak a emigrar a otros países y a la miseria. Egoístamente no quiero que mis hermanos cristianos de Irak, salgan del país, porque no quiero perder mis raíces, nuestra historia que tiene más de 2000 años. Yo no aceptó permanecer en silencio frente a la crimen en contra de mi gente, mi comunidad, mi familia, cristianos de Irak, obligados a decidir entre la conversión al Islam, el pago de la “Yizya” (impuesto islámico para los no musulmanes) o la huída. Todos los cristianos de Irak están siendo víctimas de un genocidio religioso. Según los últimos informes oficiales, desde el año 2003 hasta hoy día, los radicales islámicos en Irak han atacado, bombardeando y destruyendo 60 iglesias, asesinando 5000 cristianos entre ellos 25 sacerdotes y 5 Arzobispos, 10000 heridos, muchos de ellos discapacitados, más de 1.000.000 cristianos refugiados en distintos países Europeos, EEUU, Canadá y Australia.

Su Santidad, los musulmanes están acostumbrados a la vía de sentido único donde ellos pueden hacer todo lo que quieran y nadie les puede responder ni señalar sus actos malos o criticarlos. El Islam no es solamente una religión, es una ideología, que regula los aspectos de la vida de los musulmanes y de los no musulmanes. El Islam para los musulmanes es fe, oración, patria, nacionalidad, estado, espíritu, labor, forma de vida, actitud, pensamiento y sobre todo espada. La guerra santa o (Al- Yihad), es un pilar muy importante en el Islam, es el sexto pilar del Islam. El Islam por medio de su profeta Muhammad es la única religión que ordena a sus seguidores ser enemigos de las otras religiones y tratarlos como tales, combatir contra ellos hasta la conversión. Sahih Al Bujari, Hadiz o dicho N. 25, habla del Yihad: “Muhammad dijo: Dios me ordenó luchar contra todos aquellos que no manifiesten la declaración de la Fe musulmana, No hay más dioses que Allah, y Muhammad su mensajero, deben rezar, dar limosna y ayunar en el mes de Ramadán. Si hacen todo eso serán salvados, si no lo hacen, tienen la muerte segura”. Además el Hadiz siguiente N. 26 dice textualmente “preguntaron Muhammad: ¿Cuáles son las tres pilares más importante en el Islam? Muhammad contestó: 1º tener Fe en Allah y Su Mensajero, 2º luchar جهاد (guerra Santa) en el camino de Allah y 3º la Peregrinación".

El Islam nunca renuncia a su ideal: someter a todo el mundo a su dominio político religioso musulmán, si o si, mediante la guerra santa Al Yihad, para formar un estado islámico global bajo un Califa, e imponer la shari’a en todo el mundo (Sura 9:33) “Él es Quien ha mandado a su Enviado con la Dirección y con la religión verdadera para que, a despecho de los asociadotes, prevalezca sobre toda otra religión”. Dentro del Islam los chiíes y los sunies, están enfrentados entre sí y no están de acuerdo en muchas cosas. Pero los dos tienen en común el odio y la persecución a los judíos y cristianos. El Islam no tiene más que una cara, de la violencia y el odio a todo judío- cristiano (Sura 9:29) “Combatid contra quienes, habiendo recibido la Escritura, no creen en Dios ni en el último Día, ni prohíben lo que Dios y su Enviado han prohibido, ni practican la religión verdadera, hasta que, humillados, paguen el tributo directamente”. Según el Islam y los musulmanes, la salvación para los Infieles es la conversión. El Corán prohíbe que los fieles del Islam sean amigos de estos infieles, aunque pueden simular que son amigos, como muestra el Corán en (Sura 3:28) “¡Que no tomen los creyentes como amigos a los infieles en lugar de tomar a los creyentes -quien obre así no tendrá ninguna participación en Alá-, a menos que tengáis algo que temer de ellos. Alá os advierte que tengáis cuidado con Él. Alá es el fin de todo!”. Los musulmanes nunca tienen sentimientos de culpa, de que no hacen nada malo matando a los infieles, según las palabras del Corán en (Sura 8:17) “No erais vosotros quienes les mataban, era Alá Quien les mataba. Cuando tirabas, no eras tú quien tiraba, era Alá Quien tiraba, para hacer experimentar a los creyentes un favor venido de Él. Alá todo lo oye, todo lo sabe”, porque es el deseo de Allah y Allah solamente está utilizando sus manos para matar a los infieles.

Todos los musulmanes, todos los que creen en el Corán, tienen el mismo pensamiento. No hay dos tipos de musulmanes ni existen musulmanes, ni mucho menos imames moderados. Nunca hemos escuchado alguna palabra de condenación por parte de los clérigos musulmanes alrededor del mundo a los hechos, los crimines del Califato Islámico, ni siquiera el máximo dirigente musulmán y el Presidente de Asuntos Religiosos en Turquía. Aún más, ningún Imam musulmán en el mundo ha dicho que sean apóstatas y se encuentren en el infierno ahora. No han hecho ni lo van a hacer porque sería ir contra el Islam mismo y sus doctrinas, el Corán. Un musulmán estrictamente siempre es un musulmán que sigue la educación y las doctrinas del Corán. Y es la pura verdad, porque según (Sura 4:56-57) “A quienes no crean en Nuestros versículos les arrojaremos a un Fuego. Siempre que se les consuma la piel, se la repondremos, para que conozcan el castigo. Alá es poderoso, indudable. A quienes crean en Alá y obren bien, les introduciremos en jardines por cuyos bajos fluyen arroyos, en los que estarán eternamente, para siempre. Allí tendrán esposas purificadas y haremos que les dé una sombra espesa”. Eso significa que todos los musulmanes, tienen la obligación de creer, aplicar y respetar cada uno de los versículos del Corán a pesar de que en el publico pretendan ser musulmanes “moderados”, utilizando versículos “pacíficos” anulados del Corán, cuando quieren hablar del Islam. Totalmente mentira, porque ¡El Islam permite el engaño! el Corán, describe Allah como el dios de la intriga, le llama el mejor de los intrigantes (Sura 8:30) “Y cuando los infieles intrigaban contra ti para capturarte, matarte o expulsarte. Intrigaban ellos e intrigaba Alá, pero Alá es el Mejor de los que intrigan”. El Islam, ordena implícitamente que en condiciones de ser débiles, por la superioridad de los infieles se adopte una táctica, de parecer amistad, de simularla, para fines de sobrevivencia, en la shari’a (la Ley religiosa musulmana) leemos en el tratado de Abu Darda’, uno de los compañeros y el primer biógrafo del Profeta del Islam Muhammad: “Muhammad dijo: "Sonreímos nuestras caras a algunos no-musulmanes, aunque nuestros corazones los maldicen, es la orden de Allah mandada a través del Profeta”. Se refiere que, los musulmanes se les permite mostrar simpatía amistosa externamente (a los no creyentes; judíos y cristianos), pero nunca internamente. El erudito musulmán Ibn Kathir afirma que “A los creyentes se les permite mostrar el resultado de la amistad hacia el exterior, pero por dentro no”. ¿Qué dios es este Allah que permite el engaño, la mentira? No se puede diferenciar entre “Islam Violento” y “Islam Moderado”. El Islam es uno fanático y violento, que asume al Yihad, el odio a los infieles (no musulmanes), discriminación contra las mujeres etc.…. Por lo tanto, no se deje engañar, no hay musulmanes moderados. Es verdad que no todos los musulmanes están practicando la violencia, pero al mismo tiempo, no condenan la violencia de los radicales musulmanes. Al mismo tiempo, no se puede negar que hay musulmanes de buena voluntad, pero a pesar del Islam no gracias al Islam. El Islam es uno de los principales peligros para la paz de nuestra época, especialmente para el Occidente.

Si seguimos la pista de la vida privada de Muhammad, observamos que vivió para satisfacer sus deseos carnales. Muhammad se caso oficialmente con doce mujeres; una de ellas tenía seis años y él tenía cincuenta y uno; se caso con la mujer de su hijastro, además practicó el matrimonio de placer o temporal con cincuenta y cinco mujeres. Muhammad participó y luchó en ochenta y ocho batallas en menos de diez años desde el año 622 hasta su muerte en el año 632. En todas ellas los musulmanes a la cabeza Muhammad, lucharon, mataron y robaron. Muhammad, en su propia espada mató a muchas personas, entre ellos hombres y mujeres de su propia familia, que no aceptaron sus ideas o más tarde abandonaron su Fe. Muhammad mismo ordenaba a sus seguidores a cortar el cuello de los presionaros aplicando, sus palabras en el Corán, en la Sura que lleva su nombre (Sura Muhammad 47:4) “Cuando sostengáis, pues, un encuentro con los infieles, descargad los golpes en el cuello hasta someterlos…Es así como debéis hacer…”. Más tarde, Muhammad y sus seguidores invadieron a todas las tribus judías en la ciudad de Medina. Mataron todos los hombres, cortando sus cuellos, llevando las mujeres y los niños como esclavos y más tarde fueron vendidos en el mercado de esclavos, con la excusa de financiar las predicaciones de la fe musulmana.
Después de la muerte de Muhammad sucesivos califas se dedicaron a convertir varias partes del mundo por la espada. Dejando detrás de sí gran número de cuerpos mutilados y mujeres violadas, conquistaron grandes pueblos y regiones imponiendo su brutal dominio, en general, un río de sangre corre por la historia del Islam aun hasta hoy en día. Evidentemente no se puede culpar a toda la comunidad islámica de tener una actitud similar a la de su fundador. Probablemente muchos mahometanos no cometan las atrocidades de Muhammad, aunque defiendan su imagen como sagrada e intocable. Es obvio que muchos horrores han sido cometidos frecuentemente en diferentes partes del mundo islámico, como la actitud violenta del Islam frente al Yihad, el trato a la mujer y la niña como sujetos sexuales y las disposiciones del Corán para disponer de esclavos como botines de guerra, incluyendo mujeres, y del ajusticiamiento sangriento de cualquier que blasfeme contra el Islam y su profeta, están arraigadas en la misma vida y obra de Muhammad. ¿Cómo pueden los mahometanos condenar el robo, la mentira, la pedofilia o el incesto si su profeta lo practicaba? ¿Cómo puede el Islam ser una religión de paz si su fundador era violento? Por lo tanto, el Estado o Califato Islámico es la cara verdadera del Islam, que intenta seguir los pasos de su Profeta Muhammad y aplicar las leyes islámicas.

Yo no estoy ignorando la inquisición y los conquistadores españoles u otros acontecimientos hechos en el nombre de Cristo. Yo estoy bien consciente de los abusos del cristianismo en los siglos pasados y los encuentro bien repugnante. Pero, no encuentro en ninguna parte la conquista por la espada como el principal modo del cristianismo. Además, a lo largo de los años, muchos dirigentes cristianos, como el Papa Juan XXIII, Juan Pablo II y Benedicto XVI, todos ellos, pidieron perdón por los hechos de la Iglesia en el pasado. Diferente de Muhammad y sus partidarios, Jesús y sus discípulos no iniciaron la divulgación de su fe por la fuerza militar. Al contrario, Jesús entregó su alma por toda la humanidad, entre ellas los musulmanes. Cuando los musulmanes incendiaron iglesias en Indonesia, Nigeria, Egipto, Irán…etc. y con todas las crimines, matanzas y barbaridades del Califato Islámico contra los cristianos de Siria e Irak, ningún país de origen cristiano atacó a un solo musulmán o una mezquita. Nosotros los cristianos no actuamos con violencia ni pedimos la venganza, creemos en la convivencia y en la justicia. Porque los cristianos, gracias a Dios, no basamos nuestra fe en el odio. Una diferencia fundamental entre los cristianos y musulmanes: no todos los cristianos que van a Misa son santos, pero todos los santos van a Misa. Con el Islam ocurre todo lo contrario: no todos los mahometanos que van a la mezquita son terroristas suicidas, pero todos los islamistas, salafitas, yihadistas y terroristas suicidas han pasado por ciertas mezquitas antes de su encuadramiento definitivo como tales. El hecho evidente que los musulmanes han perseguido incansablemente a los cristianos como “infieles”, porque los musulmanes en realidad saben que Allah NO es el mismo Dios que los cristianos adoramos. De lo contrario nunca nos mirarían como infieles. Los musulmanes saben esto y por eso nos persiguen. Algunos musulmanes dicen, que Allah es el mismo Dios de los cristianos, y lo hacen de una forma evangélica engañosa para convencer y convertir el cristiano ignorante o simplemente a la persona que no conoce el Islam. Y esto lo hacen sabiendo que están engañando. Porque su dios o Allah permite el engaño o la mentira.

Esforzándose de nuevo por probar que el Corán fue inspirado y para decir que es de origen divino, ya que la más fuerte evidencia circunstancial de que la Biblia verdaderamente es la Palabra de Dios es el cumplimiento de sus muchas profecías. Por ejemplo, Moisés predijo muchísimos cosas respecto a Egipto y su pueblo que se cumplieron. Con doscientos años de anticipación Isaías predijo la liberación de los judíos del cautiverio y hasta dio el nombre del que los iba a liberar, Ciro. Jeremías predijo con exactitud que la tierra yacería desolada sesenta años. Daniel correctamente predijo la sucesión de los imperios mundiales, y también dio el año exacto de la venida del Mesías. Más de treinta acontecimientos sobresalientes en la vida de Jesús fueron predichos con exactitud; e indisputablemente la propia profecía de Jesús, registrada en Mateo 24, Marcos 13 y Lucas 21, está teniendo su cumplimento y todas éstas son específicas en cuanto a detalles. Muhammad mismo y su nueva Fe, fue el cumplimiento de una Profecía de Jesús, la más destacada, en (Mateo 24:11,23-24) “Y muchos falsos profetas se levantarán y extraviarán a muchos; Entonces si alguien les dice: ‘¡Miren! Aquí está el Cristo’, o: ¡Allá!, no lo crean. Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas y darán grandes señales y prodigios para extraviar, si fuera posible, hasta a los escogidos”. Está Profecía se cumplió, con exactitud, en el siglo VII, con la llegada y las predicaciones de Muhammad, el falso Profeta, formando una falsa religión, el Islam.
Pero ¿Cuáles son las profecías del Corán y sus cumplimientos de las cuales lo marcarían como inspirado? Nada, no hay ninguna Profecía en el Corán. Por eso, no puede decir que el Islam en general es una religión de origen divino o el Corán es un libro profético.

Con todo ello, de nuevo, desde el afecto, el amor y el entusiasmo que profeso a mi Iglesia y a Su Santidad. Consiéntame de modo fraterno, pedir a Su Santidad estas peticiones:

1. Su Santidad, antes de hablar del Islam y los musulmanes, corresponde leer el Corán, conocer bien la vida de Muhammad y el Islam.
2. Su Santidad, Le conviene cambiar sus asesores o sus consejeros sobre el tema del Islam, porque, Le están aconsejando equivocadamente.
3. Su Santidad, si busca en Sus afirmaciones el acercamiento al Islam y el dialogo con los musulmanes, sinceramente está perdiendo tiempo, porque Muhammad anima, más bien obliga, a sus creyentes musulmanes en (Suara 5:51) “¡Creyentes! ¡No toméis como amigos a los judíos y a los cristianos! Son amigos unos de otros. Quien de vosotros trabe amistad con ellos, se hace uno de ellos. Alá no guía al pueblo impío”. No pierde tiempo.
4. Su Santidad, con estas afirmaciones sobre el Islam, no está haciendo el favor a nosotros, los cristianos sufridos de Irak, al contrario nos duele escucharlas, porque no es verdad. Tampoco a los mismos musulmanes, porque tienen el derecho de conocer la verdad sobre sus creencias. Hay veces, decir la verdad duele, pero hay que decirla, si no, silenciar mejor. Hay un dicho árabe dice: “Si el habla es de plata, muchas veces el silencio es de oro”.
5. Su Santidad, recomiendo más información, mis libros: Raad Salam Naaman, Profecía y Profetas monoteístas “judaísmo, cristianismo e Islam”, editorial Monte Riego, León- España, 2014. Raad Salam Naaman, Todo sobre el Islam, Monte Riego, León- España, 2013. Raad Salam Naaman, Desvelando el Islam, Monte Riego, León- España, 2012.

Que el Señor nos bendiga a todos, sobre todo a los cristianos perseguidos por todo el mundo y a Su Santidad para el bien de nuestra Iglesia.

Que Dios me perdone si me he excedido.


Raad Salam Naaman
Cristiano católico caldeo de origen iraquí y con mucha honra nazareo ﻦ-N ﻧﺼﺮاﻧﻲ.

sábado, 6 de diciembre de 2014

He imaginado por un momento...

Por un momento he imaginado a la mujer de Aznar  o a la de Rajoy concediendo trato de favor a un su hermano hipotético y su padre en el mismo Ayuntamiento… a Rosa Díez cobrando en dinero negro y  que el empresario enseñara “los recibos”, a  Sánchez el del Pesoe chupando de una supuesta ONG sin ánimo de lucro, a Albert Ribera cobrando 1825 euros  por decir que era para estudiar las viviendas de Andalucía pero viviendo en Barcelona y a los de Podemos  comentando dichas corrupciones y predicándolas por los platós de las televisiones. ¡ Qué vergüenza…!

miércoles, 3 de diciembre de 2014

JULIO ANGUITA

Y aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, qué bien me cae Anguita. Sí, sí, Anguita el comunista, el que ha dado una lección magistral sin pronunciar una palabra al periodista de los pelos pinchos. Chapeau, camarada. Que la izquierda española le haya dado la espalda una y otra vez, y se embobalique con cualquier señoritingo con un Iphone de Apple en la mano, el mayor exponente del Capitalismo, diciendo tan pronto que es antisistema, como que ya cambia en un día a ser socialdemócrata, y vete tú a saber con lo que salta mañana…  es para salir corriendo.

La máquina de Stephen Hawking

La máquina que convierte los pensamientos de Stephen Hawking en palabras articuladas, será verdad, no lo discuto, porque no lo he visto; pero yo no me lo creo. Y no me lo creería ni aunque lo viera con mis propios ojos.  Recuerdo una clase del Dr. López Ibor en la Facultad de Medicina de Salamanca, hablando del electroencefalograma que nos decía esta idea con un ejemplo:  “Del “electro-encéfalo-grama” no podemos extraer diagnósticos concluyentes. Debemos de utilizarlo sólo como complemento muy grueso y con mucha cautela. Imaginemos que escuchamos a través de un fonendo aplicado a la pared exterior de una gran fábrica con muchas máquinas. Lo más que podemos concluir es que la fábrica está en marcha o está parada y, a lo  sumo, puntualizando mucho, si un sector tiene desenganchada la cadena de montaje. Pero, de momento, querer averiguar cuál es la tuerca floja que enlentece la cuarta cadena de montaje es imposible.
Lo de la transmisión del pensamiento de Stephen Hawking es aún más difícil, como si en vez de un fonendoscopio aplicáramos a la pared de una central eléctrica una trompetilla y tratáramos  de averiguar qué condensador variable está roto. Lo de Stephen Hawking yo no me lo creo hasta que me lo demuestren…y me expliquen cómo.

martes, 2 de diciembre de 2014

Euskera y armenio (El número diez)

Toda investigación tiene dos vertientes. Una, el conocimiento de lo que anteriormente otros han investigado. Dos, lo descubierto “ex novo”, de lo que no se tenía ni la más remota idea.
A lo que yo he venido llamando metafóricamente “teselas” del gran mosaico, que hay que ir descubriendo, corresponde la vertiente dos: “ex novo”

Otra tesela más:  Comparemos dos palabras: la palabra armenia “համարը”  [ hamár-e ] con la palabra vasca “hamar”

La palabra latina “calculus” significa piedrecita pequeña.
¿Quién no tiene una tía o una abuela operada de “cálculos” en el riñón o en la vesícula biliar”
A los romanos, que eran espabilados para la gramática y para el derecho y  brutos para las matemáticas, no se les ocurrió más que usar “cálculos” -piedrecitas  o bolas de arcilla cocida- para contar, y los colocaban en el ábaco, así hacían sumas interminables contando cualquier cosa.
Eso de los números, uno encima de otro, y sumar llevando fue un invento asiático.

Mucho antes que los romanos hubo mentes matemáticas en Asia, donde ya utilizaban, para hacer operaciones, los números con la “base 10” , “la base” por excelencia en la matemática desde el comienzo de la civilización humana; allí nacieron las primeras letras y los primeros números: en Armenia, en Persia y en la India.

Los números condicionaron e hicieron evolucionar el lenguaje humano en sus manifestaciones más abstractas, en esas civilizaciones pioneras, cuando en el fin de la Tierra, en nuestra piel de toro y en la actual Francia, no había más que selvas inmensas y ríos caudalosos en cuyas orillas y cuevas aledañas pululaban seres humanos gruñendo sonidos semiarticulados y, todo lo más, se tiraban pedruscos para matarse unos a otros. Por supuesto, de matemáticas y de pensamientos abstractos, nada de nada. 

Mira tú por dónde la palabra armenia [ “hamár-e” ] significó el concepto abstracto de “número”. Es decir, que para expresar el concepto de número se dice y se dijo   [ hamár-e ], y desde los albores de la historia de las matemáticas en Armenia se operó en base 10. El número por excelencia fue el 10. Es más, ya los griegos tomaron del oriente las operaciones, sumas y restas “en base 10”, utilizando los signos gráficos de los números.

Encontramos en el norte de España y sur de Francia,  a partir del siglo XV - hace cuatro días, como quien dice, para la historia de una lengua- una palabra enigmática como surgida de la nada, entre otras de la numeración en el naciente euskara, cuando la matemática en nuestras latitudes ya había avanzado fruto de las civilizaciones  visigodas, y árabes medievales:  la palabra vasca “hamar” que significa “diez”



Aunque en armenio “համարը”  [ hamar-e ], signifique “número” en abstracto; y en vasco [ hamar ] signifique “diez”, que es el número por antonomasia,  son exactamente la misma palabra. Cada vez cabe menos la duda de que los idiomas caucásicos conformaron la lengua euskara en la Edad Media, y y no nació única y aislada hace milenios y milenios…

lunes, 1 de diciembre de 2014

Sobre la corrupción en la Universidad,

http://elpais.com/elpais/2014/11/28/opinion/1417202506_176244.html

Félix de Azúa:
Me ha llamado mucho la atención el eco que ha tenido la beca del profesor Errejón. En efecto, un amigo y conmilitón suyo le consiguió una beca sustanciosa (las hay regulares y las hay king size,esta es de las buenas) tras convocar la ayuda de manera que sólo Errejón podía presentarse y presentóse y ganóla. Entre las bases y condiciones para acceder a la beca sólo faltaba añadir “que gaste gafas de pasta y cuyo apellido empiece con E”.
Pero ¿cuál ha sido el escándalo? Aquellos que conozcan la Universidad española desde dentro (yo he dado clases allí 30 años) saben que este procedimiento no es una excepción, sino la regla, la base misma de su funcionamiento. ¿Cómo creen que se elige a los titulares, al jefe de departamento, a los becarios, al decano, al rector? ¿No han oído hablar de la endogamia universitaria, de las mafias departamentales, de las cátedras hereditarias? En algunas ocasiones estas corruptelas se usan para mantener la coherencia ideológica o teórica de un departamento, lo que es hasta cierto punto comprensible, pero la mayor parte de las veces es simplemente el modo de mantener una clientela vitalicia.
Dicho sin farisaísmos, la Universidad está tan corrompida como las finanzas, los partidos o los sindicatos: es una de las instituciones más corruptas del conjunto institucional español. Por esta razón la enseñanza española es la que recoge la más baja calificación en todo el conjunto europeo, un suspenso que se sucede año tras año con gran regocijo de los partidos políticos.
De hecho, puede decirse que no hay auténtica competencia en la adjudicación de las plazas, en los tribunales de oposición, en los de tesis doctorales, y lo que es más grave aún, la nuestra es una Universidad mineralizada, fosilizada, sin traslados, sin musculatura. Los profesores están atados a su plaza geográfica de por vida. Si a pesar de todo muchos de ellos realizan una labor admirable es gracias a una vocación férrea.
Ahora bien, ¿han oído a Iglesias, a Errejón, o a los dirigentes de Podemos en la sombra presentar un programa de limpieza del mundo universitario español? No lo verán. Están allí acomodados como Blesa y sus chicos en Caja Madrid. La Universidad es su finca y nadie se atreverá nunca a limpiar esos establos. Los jefes de Podemos pueden lanzar a la calle 100.000 individuos en media hora y colapsar una ciudad. ¿Van a decir algo sobre los funestos sindicatos estudiantiles? ¡Cómo van a hacerlo si ellos los controlan! También son ellos quienes deciden quién entra y quién no en su residencia. Cuando revientan actos no lo hacen por ideología (de la que carecen, aparte de un sumario castrismo-leninismo), sino para mostrar quién es el amo de ese mayorazgo. En los reportajes de aquella violenta irrupción en la conferencia de Rosa Díez se puede ver a los jefes y matones del actual Podemos intercambiando órdenes como si fueran los falangistas de la Complutense de los años treinta.

Lo que me llama la atención es que esta gente aún no haya dicho nada sobre la futura enseñanza en España
Es un comportamiento análogo al de Mas y los separatistas, los cuales no se enfrentan al Estado para conseguir la independencia de Cataluña, que saben les arruinaría, sino para dejar claro quién manda en la finca. De modo que no se trata de ganar, sino de humillar al Estado. ¿Tribunales Supremos a mí? ¡Anda ya, españolito alpargatero! ¡Aquí mando yo, o sea, el Pueblo Catalán Carolingio! El comportamiento de los caudillos totalitarios es siempre el mismo, no queda nada por inventar.
A mí no me escandaliza que Errejón se haya mercado un beneficio estupendo, sobre todo él, que no lo necesita porque es de familia acomodada. Lo que me llama la atención es que esta gente que conoce sobradamente la corrupción universitaria de la que se alimenta aún no haya dicho nada relevante sobre la futura enseñanza en España cuando ellos manden, como no sean cuatro vaguedades idealistas del tipo “la Universidad ha de estar al servicio de los pobres”, ya conocen la música. Pero, ¿van a mantener el sistema tal y como está, con sus tribunales amañados y sus convocatorias a medida? ¿Qué haréis con las castas universitarias, camaradas? ¿Y con el feudalismo de las universidades primitivas, donde para ganar una cátedra de Física Cuántica lo importante es haber nacido en Vic? ¿Mantendréis el sistema de rectores como títeres decorativos? ¿Y los planes de estudio deformados departamento a departamento según el interés de la plantilla?
Podemos es un partido de profesores universitarios, o lo que es igual, una quimera. Un profesor universitario es un funcionario aún más irresponsable si cabe. La libertad de cátedra le permite explicar al alumnado la vida de Lola Flores o las teorías de Kripke con igual protección estatal y sueldo. Puede fantasear hasta el delirio, por ejemplo reconstruyendo la Unión Soviética en clase, sin que nadie pueda decirle que eso no entra en el programa de Filosofía de la Ciencia. No obedece al menor control, excepto el de sus jefes de departamento (y tampoco mucho), lo que provoca unas relaciones serviles hasta la caricatura que en los estratos inferiores es de pura esclavitud. Un partido de profesores universitarios reproduce el mundo virtual de las aulas, con todos sus delirios y su onirismo, a escala estatal.
Si ya la Universidad española (sector Humanidades) es como un cetáceo muerto, imagínense un país construido con los mismos mimbres. Un cementerio de elefantes. Y ratones.