Me ha ocurrido una anécdota: Un hijo de un allegado estaba relatando que “un edificio comenzó a arder cuando todos los vecinos y vecinas dormían.
Yo, por su bien, le corregí diciendo que no confunda género de las palabras con sexo biológico de seres humanos y animales, y que “vecinos” es una palabra de género masculino, y número plural, que significa ya vecinos y vecinas, que no hiciera el ridículo con la redundancia. Y se atrevió a decirme que eso era de machistas que van contra la mujeres… y más y más… Se despachó bien el muchacho.
Ya con más paciencia que el Santo Job, me contuve, porque de primera intención me iba a salir llamarle cabestro, pero me contuve diciéndole: “ Vamos a ver, no te voy a dar una lección de gramática ni de historia de la lengua, pero hasta tú me lo vas a entender con una sola frase:que yo te añado: “el edificio comenzó a arder cuando todos los vecinos dormían. A pesar de las sirenas de alarma “algunas criaturas” quedaron atrapadas y murieron”. Y le llamé “político” con ironía diciéndole con su propio lenguaje: “ A ver, “político de nuevo cuño” ¿lo pillas”? Y se quedó con cara de lelo, pero no lo pillaba y tuve que seguir: “¿No te das cuen de que “criaturas” es una palabra de género femenino con la que significamos los dos sexos biológicos de hombres y mujeres tanto vecinos como vecinas que quedaron atrapados? Y el muy cabestro me respondió: “ pues no lo pillo, no”
Pues que te den morcillas, y allí lo dejé con su ignorancia a ver si a solas…
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